Hello, my friends.
As @joanstewart says, in most households, it's the woman who does all or almost all the housework. Especially here in America, and particularly in Latin America. It's a patriarchal and sexist structure imposed for centuries.
Before answering the question, let me give you some context.
During my childhood and adolescence, that task fell to my mother. I'm an only child, and it was practically just the two of us, since my father was just a burden and a burden we couldn't get rid of.
So she tried to teach me how to do everything around the house to help her. Everything “a man could do.”
In other words, no washing, cleaning, sewing, or anything like that. You can imagine.
In 2009, my mother went on a trip, and I was left alone in the house. That's when I started, out of necessity, doing everything around the house. That's when I learned to do everything my mother hadn't taught me and perfected what she had.
So I took all that learning as a tool to my advantage. Now I don't need anyone to do things for me. I can manage on my own.
Now I can answer this week's question.
In our house (@elviguitarra's and mine), there isn't a system of assigned chores. We divide them equally. That is, I usually cook, since I like to cook.
But, if I'm writing or reading, out of the house, or simply tired or unmotivated, Elvira does the chore without any problem.
The same happens in reverse. She does some of the chores I like least, but that doesn't mean I don't do them.
On the contrary, since I'm the one who spends the most time at home, most of these household chores are my responsibility.
There are also other tasks that we both do, like shopping, taking care of the children, etc.
For someone who didn't grow up in a happy home, with a mother overburdened with chores, it's illogical to repeat this archaic and unfair pattern. In our home, what we seek is to help each other and live in perfect harmony. We seek to live happily.
Versión en español
Hola, amigas mías.
Tal y como dice @joanstewart, en más de la mayoría de los hogares, es la mujer la que lleva todas o casi todas las labores domésticas. Sobre todo aquí en América y en especial, en Latinoamérica. Es una estructura patriarcal y machista impuesta durante varios siglos. Antes de responder la pregunta, voy a ponerlos un poco en contexto.
En mi infancia y juventud, esa tarea estaba a cargo de mi madre. Soy hijo único y prácticamente éramos ella y yo, ya que mi padre era solo un estorbo y un mal del que no podíamos desprendernos.
Así que ella trató de enseñarme a hacer todo en la casa para ayudarla. Todo lo que “un hombre podía hacer”. O sea, nada de lavar ni limpiar ni coser ni cosas semejantes. Pueden hacerse una idea. En el año 2009 mi madre se fue de viaje y me quedé solo en la casa. Ahí fue que comencé, por obligación, a hacerlo todo en la casa. Ahí aprendí a hacer todo lo que mi madre no me enseñó y perfeccioné lo que sí.
De modo que tomé todo ese aprendizaje como una herramienta a mi favor. Ahora no necesito que nadie haga las cosas por mí. Me puedo valer por mí mismo. Ahora sí puedo responder la pregunta de esta semana. En nuestra casa (de @elviguitarra y mía), no hay un sistema de tareas asignado a cada quien. Las tenemos por iguales. O sea, por lo general, yo cocino, ya que me gusta cocinar. Pero, en el caso de que esté escribiendo o en alguna lectura, esté fuera de la casa o, sencillamente, esté cansado o sin ganas, Elvira realiza la tarea sin ningún problema. Lo mismo sucede al revés. Ella realiza algunas de las tareas que menos me gustan a mí, pero eso no quiere decir que yo no las haga. Al contrario, como soy el que más tiempo pasa en la casa, la mayoría de estas labores domésticas son mi responsabilidad. También hay otra serie de tareas que son realizadas por los dos, como las compras, atender a los niños, etc.
Para alguien que no creció en un hogar feliz, con una madre sobrecargada de tareas, no es lógico que repita este patrón arcaico e injusto. En nuestro hogar lo que buscamos es ayudarnos mutuamente y vivir en perfecta armonía. Buscamos vivir en felicidad.