For days, I had been thinking about visiting the cat park, as I call it, the Parque del Oeste or also known as Ali Primera, which is relatively close to my house. This is a park where people go to exercise in its various designated areas, also for children's gatherings, parties, yoga groups, dancing; it is a very visited and popular park, but there is something that attracts me more than any of these things, and that is that this place is home to many kittens.   And so when I come here with the purpose of exercising, I end up staying to pet and take pictures of these beauties. In fact, I have already posted some from this place; but today I went with the purpose of fulfilling that mental promise I made to myself the last time I visited, which was to bring food and water to these adorable cats. So I went to where I usually buy food for my cats and bought them gatarina, I already had the water.  So after I did some more shopping, I headed to the park in question and as soon as I entered, walking a bit, I could see where people usually leave food for them, but I didn't want to approach that place because I noticed there were some scraps and I preferred to call the cats to the walkway, to place their food in a somewhat cleaner space; I immediately proceeded to distribute the cat food in groups, not all in one place.  Because I realized that there were some quite territorial cats and they wouldn't let the smaller or more docile ones eat, so I had to apply this method to distribute what I had brought more equitably. It was incredible to see how more and more cats appeared in all colors, shapes, and sizes. There I was, looking like the cat lady: ha, ha, ha, in fact, people were looking at me with curiosity, but I was inspired to take care of my new friends.  After I fed a good group of them, I continued walking around the place enjoying the gentle breeze, as it was getting close to rain, but I loved enjoying this weather, I felt like I needed to cool off a bit, as the heat wasn't mild; then I stumbled upon another friend, a lovely little black dog who suddenly started following me, I named him "negrito." I sat down while I fed a lonely cat, and the little black one started frolicking in the grass; I regretted not having any food for him.   But I enjoyed taking some photos of him, to immortalize him during my visit as well. From there, I left serene, relaxed, after having done my social work for the day, this time with my beloved cats. I hope to bring something to eat for Negrito on my next visit, wishing that he is still in that place. I hope you enjoy this visit as much as I do! Best regards! 

Español

 Desde hace días, tenía en mente, visitar el parque de los gatos, como le digo yo, al parque del Oeste o también conocido como Ali Primera, que queda relativamente cerca de mi casa. Este es un parque donde las personas van a ejercitarse en sus diferentes áreas dispuestas para ello, también para reuniones infantiles, fiestas, grupos de yoga, baile, es un parque muy visitado y popular, pero hay algo que me atrae más que cualquiera de estas cosas y es que este lugar es el hogar de muchos gatitos. Y entonces cuando vengo acá con el propósito de ejercitarme termino por quedarme acariciando y tomándole fotos a estas bellezas de hecho, ya he publicado algunas de este lugar; pero hoy fui con el propósito de cumplir aquella promesa mental que me hice la última vez, que lo visite y era llevarles alimento y agua a estos adorables gatos. Así que fui donde acostumbro a comprarle la comida a mis gatos y les compré gatarina, ya llevaba también el agua. Así que luego de que hice algunas compras más, me dirigí al parque en cuestión y nada más entrar, caminando un poco pude ver donde ellos generalmente las personas le dejan comida, pero no quise acercarme hacia ese lugar porque pude ver que había ciertos desperdicios y preferí llamar a los gatos hacia la caminería, para colocarles en un espacio más limpio entre comillas el alimento; de una vez procedí a ponerles por grupos la gatarina, no todo en un solo lugar. Porque me di cuenta de que había algunos gatos bastante territoriales y no dejaban comer a los más pequeños ni a los más apacibles, así es que tuve, que aplicar este método para poder distribuir más equitativamente lo que les había llevado. Fue increíble ver cómo aparecían más y más gatos de todos los colores, formas y tamaños. Allí me vi como la señora de los gatos: ja, ja, ja, de hecho las personas me veían con curiosidad, pero yo estaba inspirada en atender a mis nuevos amigos. Luego de que les di a un buen grupo alimento, seguí caminando por todo el lugar disfrutando de la suave brisa, que estaba haciendo, ya que se acercaba la lluvia, pero me encanto disfrutar de este clima, sentía que necesitaba refrescarme un poco, pues el calor no estaba suave; en eso me tropecé con otro amigo un lindo perrito negro que de buenas a primeras empezó a seguirme, lo bautice como "negrito". Me senté mientras le daba comida a un gato solitario y el negrito empezó a retozar entre la grama; lamente no tener nada de comida para él. Pero disfruté tomándole algunas fotos, para inmortalizarlo en mi visita también. De allí salí serena, relajada, después de haber hecho mi labor social del día, esta vez con mis queridos gatos. Espero para la próxima visita también llevarle algo de comer al Negrito, deseando que aún esté en ese lugar. Espero que disfruten esta visita tanto como yo, ! Saludos!