Hay días donde no sabemos expresar lo que sentimos, donde nos sentimos mal, nos sentimos tristes o apagados y a veces el cuerpo está presente pero mente está en otro lado, a mí me ha pasado y en esos momentos descubrí que el arte y la creatividad puede ser de gran ayuda emocional. Puede ser algo liberador donde puedes expresarte como quieras. He realizado diferentes actividades y manualidades algunas por obligación, otras por gusto y siento que a veces me ha liberado, por lo cual me ayudaba a sentirme mejor.
He hecho flores de papel, decoraciones, dibujos, incluso un regalo especial para una amiga, fueron unas flores, que me salieron tan lindas, que hasta me sorprendí. No era solo un detalle para ella, era una forma de decirle te quiero, sin palabras y al mismo tiempo fue una forma de cuidarme a mí. Porque mientras las hacía me sentía tranquila,enfocada y feliz.
Muchas veces, lo que nos inspira llega sin avisar, me ha pasado con diferentes libros que he leído, como en el colegio o algunos que me conseguía por internet. Algunos libros me traían la calma, que a veces no había tenido tiempo para sentirlas.
Todos hemos tenido tiempos difíciles, momentos de crisis, de tristeza, pero siempre encontramos el lugar donde mejorar y crecer. El arte es una terapia donde nos ayuda a sentirnos mejor, y una de esas grandes ayudas, es la gran terapia de la creatividad, donde vuela nuestra imaginación. Y realizar diferentes actividades donde la disfrutamos y demostramos nuestros talentos.
No hace falta ser un artista experimentado para que el arte te sane, basta con permitirte crear aunque sea algo pequeño, y nadie lo vea, o no tenga sentido, porque en ese acto estás diciendo “estoy aquí” y “me expreso”.
Recuerdo una vez que en mi escuela, nos pidieron hacer un tríptico sobre un libro en específico, un libro que nos inspirada. Y yo realicé uno que hablaba del amor loco, me metí tanto en ese trabajo, que terminé decorándolo con frases, colores, ideas, que salían de mí sin pensarlo. Y cuando lo vi terminado, sentí que había puesto una parte de mí, Esa inspiración, me hacía crear cosas tan bonitas, y que las personas lo admiraran, me sentía bien.
También me ha pasado con la música. Escuchar ciertas canciones me ha llevado a escribir, dibujar, a imaginar cosas que luego se convierten en algo real. A veces solo necesito ponerme los audífonos y dejar que todo fluya, y eso aunque parezca una cosa simple, me ayuda a estar conmigo misma.
En mi opinión el arte en cualquier aspecto es una especie de terapia silenciosa, por lo cual no se necesita un diagnóstico ni una receta específica, solo se necesita un espacio donde nos podamos conectar. Cuando hacemos manualidades, o decoramos algo cuando, escribimos, pintamos y escuchamos, estamos expresando lo que a veces no sabemos decir, y eso nos libera nos ayuda a conocernos, a entendernos y a tener un mejor desenvolvimiento en lo que hacemos, y en cómo nos relacionamos con los demás.
Crear es una forma de escucharnos sin interrumpir, de estar presente, de darle forma a lo invisible. Y eso aunque no le digamos en voz alta tiene un impacto profundo en nuestras vidas.
Y eso aunque parezca simple es sano.
si estás pasando por un momento difícil, o simplemente sientes que algo dentro de ti necesita moverse, prueba con el arte. Hazlo con tus manos, escribe, dibuja, decora, crea algo para ti o para que alguien que amas. No para mostrarlo, o para que lo aprueben solo porque sí, porque cuando hacemos cosas con el alma, el alma responde.
