Te tengo toda la sana envidia del mundo, yo siempre he querido tener un jardín así pero la maldición de vivir en un segundo piso no me lo permite. El problema es que ni la azotea puedo usar, porque hace falta para tender la ropa y eso.
Siempre me ha parecido que tener un jardín así es la mejor idea, entre plantas medicinales y condimentos existe una alianza natural que en definitiva solo puede ayudarnos. No sé tú pero yo soy fanático a los condimentos frescos, eso de polvos en paqueticos o pomos (con algunas excepciones) no me resulta muy convincente.
Albahaca morada y blanca, culantro, cilantro, ají, ajo porro, yerba buena, romero, manzanilla y el etc es tan largo que se pierde de vista. Además, tener un rincón verde tiene un efecto muy saludable sobre la psiquis. Te lo repito: te envidio.