Amores perros/ By @dabird
Un día común en un parque de Bogotá, una mujer sentada observa el discurrir de los cuerpos ocupando su mirada por unos instantes. Ella aprovecha el tiempo para cubrir parte de su sustento ofreciendo a los distraídos unos dulces en forma de corazón a cambio de alguna moneda. Entre tanto, aprovecha para darle un momento de alegría a su familia perruna. La vida es dura pero tiene forma de corazón, sin embargo hay que tomar precaución y prepararse para el frío de la noche... deben permanecer unidos.