¿El pez grande se come al chico? - Does the big fish eat the small one?

La vida es un ciclo, y tú eres parte del movimiento puro y simple de ella, en algunas ocasiones la vida nos hace ver que todo se viene abajo, que los peces grandes se comen a los pequeños, y que los que tienen poder o influencia, no ven o no valoran el trabajo silencioso, que tienen quienes nadan contra la corriente, para poder lograr sus objetivos o demostrar qué están allí, tratando de hacer un mundo mejor.  La vida no es una línea recta, es una marea que sube y baja, a veces el mundo no te escucha, pero tu luz nunca se apaga. El pez pequeño esquiva, resiste, y nada con esperanza. ### Aunque nadie te ovacione, Aunque nadie te vea, sigue sembrando en silencio, porque la valentía no grita, solo se levanta en el intento. Lo que hoy duele, mañana será tu mayor fortaleza. ### La vida no es una línea recta, es un ciclo, y todo ciclo demuestra que lo que hoy está abajo, mañana puede estar arriba, lo que hoy nos duele en el alma, mañana nos enseña a soportar aún más de lo que podemos, la vida enseña, lo que hoy se ignora mañana se celebra con gracia y regocijo. Recuerdo haber leído en algún momento en un libro, que el pez grande se come al chico, sin embargo, los peces grandes tienen momentos en los cuales se sorprenden porque el pez chico, nada más rápido que ellos, los esquiva y se adaptan a la teoría de invulnerabilidad de la cual los peces grandes tienden a gozar. ### Porque la vida no es solo fuerza, es ritmo, es tiempo, y también es transformación. --- Todo vuelve y todo pasa por algo, hay días en que el mundo parece sordo, en que nuestras ideas no tienen eco, además sentimos que nuestras manos no tienen apoyo, que nuestra voz se pierde entre el ruido de los que gritan más alto, pero no debemos detenernos porque el ciclo sigue, y lo que hoy no se ve, mañana será evidente en el mundo, lo que no se valora, mañana será esencial para poder crecer. La vida es como el mar, tiene mareas altas y mareas bajas, hay momentos de calma y otros momentos de tormenta, en los cuales podemos encontrar olas que nos empujan hacia mar adentro y otras que nos hacen chocar con la arena de la orilla, pero incluso en medio del caos hay un aprendizaje, hay una fuerza invisible que nos mantiene y una dirección que poco a poco se va mostrando en el camino.  Debemos ser valientes, aunque nadie lo note, aunque nadie nos ovacione, aunque parezca inútil para los demás, debemos luchar por nuestros objetivos, la valentía no siempre se nota, no siempre se aplaude, algunas veces es simplemente levantarte un día más para seguir creyendo en ti, cuando todo parece decirte que no, algunas veces, es sembrar sin saber si habrá cosecha, pero los ciclos existen y lo que hoy sembramos, aunque sea en tierra seca, puede florecer cuando menos lo esperamos.  No estamos solos, hay otros que nadan al mismo ritmo que nosotros y otros que también han sido invisibles, ignorados e incluso subestimados, siguen porque saben que el ciclo no se detiene, que la vida da muchas vueltas, y que el sol vuelve a salir a dar la claridad e iluminar todo a su paso a pesar de que la oscuridad no se quiere ir. Nuestro momento llegará, no porque alguien nos lo diga, no porque alguien nos lo dé, sencillamente porque nosotros construimos ese momento que tanto anhelamos. No esperemos que los peces grandes nos hagan espacio en su mesa, nosotros debemos nadar en nuestro propio océano sin esperar que los demás nos vean, haz que tu luz sea imposible de ignorar. Como me decía un viejo amigo que hoy descansa bajo tierra, brilla por luz propia, no esperes que los demás brillen por ti ni te hagan brillar. Y si hoy estás en la parte baja del ciclo, no desesperes, respira, aprende y fortalécete, porque todo lo que estás viviendo, ahora te está preparando para lo que viene y te hace más fuerte. La vida es un ciclo y tú eres más fuerte de lo que crees, la vida es sumamente sorpresiva, nada es predecible, sin embargo, podemos edificar nuestro futuro y adaptarlo a las situaciones venideras. >>Imágenes creadas con Canva pro.