Hay noches donde te miro callada, con miedo a lo que mis ojos puedan decir, como si no lo supiera; como si nadie notara que soy absurdamente feliz. Al principio no había razón aparente pero al verte, sé que lo entendieron todo.
Todos dicen que la vida son etapas y yo solo quiero decir que amé llegar ese viernes al lugar donde te conocí, casi destinados a encontrarnos, tanto tiempo buscándonos y nos encontramos ahí, en tus ojos, o en los míos de vez en cuando, así como de cuando en vez tomamos un tren que nos lleva a la vida del otro.
Amé (re)conocerte amé encontrarnos y amé la búsqueda que me llevó a ti, porque también logré dar conmigo.