Hola amigos,espero se encuentren super bien! 🌻
Hoy es un buen día para recordar, porque recordar es vivir. El 29 del mes pasado viaje para Carúpano, pues estaba muy emocionada de poder correr en la primera edición de la Carrera/Caminata Santa Rosa 10k Organizada en Carúpano en honor a Santa Rosa de Lima, patrona de Carúpano.
Este evento deportivo se estaba realizando por primera vez y la emoción de poder correr en mi pueblo me emocionaba muchísimo, así que apenas me enteré me inscribí ☺️. El viernes 29 llegué a Carúpano y pase retirando mi kit: la camisa, el número dorsal y un chocolate junto algunos souvenirs de los patrocinadores. El estampado de la camisa me encantó.
El día de la correrá debía estar temprano, en el lugar de partida... Llegué apenas unos 15 minutos antes de dar la señal de partida, así que calenté lo mejor que pude para asi dar inicio. Estás carrera recreativas me encantan, pues la energía que se vive en ellas es genial, siempre haces nuevos amigos y coincides con muchas personas con las que pasas un día diferente.
Está oportunidad para mí fue muy especial porque entre los espectadores estaban mi papá, mi mamá, mi hermana y mi pequeña sobrina que la verdad no entendían la razón por la cual corría jejejeje pero vivieron está carrera conmigo y ahora sí entendieron la P*** Vibra, a disfrutar junto conmigo y las otras personas que no nos conocíamos pero era como si nos conociéramos de hace tiempo. Mi hermana y mi mamá dijeron que para la segunda edición harían la caminata y eso me emociono mucho.
Luego que salir de la línea de partida saque mi teléfono para registrar la carrera en strava y luego ver el tiempo y el ritmo... Aunque siempre digo corro a mi tiempo y a mi ritmo 😅 pero ver los resultados si causan motivación de creer que siempre puedes correr un poquitín mas rápido. El recorrido fue hermoso. La costa de Carúpano a un lado, su gente cálida, se convirtieron en escenario de una fiesta en movimiento. Había bandas tocando, grupos de animación, personas con carteles alentando a los corredores. Cada esquina era una inyección de energía.
Entre todos los carteles, hubo uno que me tocó profundamente. Lo sostenía un niño, con una sonrisa tímida pero luminosa, lo vi durante la carrera y luego lo volví a ver en la bailoterapia que se hizo al final. Me hizo sentir vista, comprendida, acompañada y como yo seguramente muchas personas se sintieron identificadas, fue como si ese niño, sin saberlo, me hubiera regalado un empujón emocional que me duró todo el día.
Yo me disfrute muchísimo está carrera, hice mi recorrido, conocí nuevas personas, baile y disfrute de una mañana diferente con mi familia y como ustedes cuando uno la pasa bien, casi no saque el teléfono, por lo que no tengo muchas fotos pero si tengo mi corazón ❤️ llenos de valiosos momentos.
Correr en mi pueblo, en una carrera que honra a su patrona, rodeada de mi gente, fue más que un evento deportivo. Fue una celebración de vida, de comunidad, de fe en el movimiento. Fue una forma de decir “aquí estoy”, de conectar con mis raíces, de compartir mi alegría con quienes amo.
Y si me preguntan por qué corro, les diré que corro para sentirme viva. Para recordar que el cuerpo es capaz, que la mente se fortalece, que el alma se expande. Corro para encontrarme, para celebrar, para agradecer.
Gracias, Carúpano, por regalarme esta experiencia. Gracias a los organizadores, a los voluntarios a cada persona que hizo posible esta carrera. Y gracias a ustedes amigos, por acompañarme en este #TBT que no es solo mío, sino de todos los que creen que recordar es vivir.