No hay palabras que describan el amor que una madre siente por sus hijos. Por más que lo pienso y los siento más difícil se me hace explicar con palabras que existen el amor y la fascinación que siento por mi bebé.
Cada día que pasa, la observo y no puedo creer que ella haya salido de mi, que yo haya tenido una niña tan hermosa y soñada, me siento bendecida por tan grande recompensa. Aunque me hayan pasado mil cosas, y la vida sea complicada ella es mi mayor premio, seguro debí haber hecho algo bien para merecerla.
Pero a pesar de sentir todo eso, algunas veces siento también por un segundo como si esta no fuera mi vida, como si de repente estuviera en otra realidad, a veces no puedo creeer que ella es mi hija, que yo haya tenido una hija, han pasado 6 meses desde su nacimiento y aun no lo creo, todos los dias la tengo conmigo, la atiendo y trato de ser la mejor madre para ella, y aún asi me sieto por momentos desconectada, ¿será parte del post parto?, me pregunto cuando me ocurre, pero sigo, sigo resolviendo, sigo con mi vida, sigo siendo la mamá que soñé que sería algún día e intentaré cumplirle ese sueño a mi niña interios, trateré de ser la madre que yo debí tener de niña.
No soy expresiva con mis sentimiendo haciqa los demás pero mi hija se merece ser tqan amada como validada, y yo soy la primera que hará que se sienta así.
Este post va dedicado a mi hija Anifa Victoría, espero cuandi sea grande pueda leeerlo y quizá, solo quizá entender un poco del amor que siento en esre momento por ella.
Te amo hija de mi vida, tu mamá Esthefania.
Lo escribo, lo leo, lo releo y ya me lo creo, vivo en un sueño, pero ese sueño se hizo realidad, ser tu mamá.
Les adjunto una fotografía, de la autoría de mi esposo Omar.
Gracias por leer ❤
-- Text in english --
Being Your Mom: The Realest Dream Dream I've Ever Lived.
There are no words that can describe the love a mother feels for her children. The more I think about it and feel it, the harder it becomes to explain the love and fascination I feel for my baby.
Every day that passes, I look at her and I still can’t believe she came from me—that I gave birth to such a beautiful and dreamed-of little girl. I feel blessed with such a great reward. Even though so many things have happened to me, and life is complicated, she is my greatest prize. I must have done something right to deserve her.
But despite feeling all that, sometimes—even just for a second—I feel as if this isn’t my life, like I suddenly slipped into another reality. Sometimes I can’t believe she is my daughter, that I actually had a daughter. It’s been six months since her birth and I still can’t believe it. Every day she’s with me, I care for her and try to be the best mother I can be. And yet, I sometimes feel disconnected. Could it be part of postpartum? I ask myself when it happens. But I keep going—I keep solving, I keep living, I keep being the mom I once dreamed I would be. And I’ll try to fulfill that dream for my inner child. I’ll try to be the mother I needed when I was a little girl.
I’m not very expressive with my feelings toward others, but my daughter deserves to feel as loved as she is validated—and I’ll be the first to make sure she does.
This post is dedicated to my daughter, Anifa Victoria. I hope that when she grows up, she can read this and maybe—just maybe—understand a little bit of the love I feel for her in this moment.
I love you, daughter of my life. Your mom, Esthefania.
I write it, I read it, I reread it—and now I believe it. I’m living in a dream, but that dream came true: Being your mom.
Attached is a photo taken by my husband, Omar.
Thaks for reading ❤