Genial la idea que trae @marpasifico a nuestra casa de #greenzone ¿Qué tienes para contar? Iniciativa #2. /… El tema nos remite a nuestra juventud.
Recurso Recuerdo aquel día de diciembre cuando, al regresar a mi cátedra después de impartir un turno de clases, me presentaron a la nueva profesora de Inglés, de repente sentí un impacto estremecedor. Días después, aprovechando el momento en que el resto de los profesores habían ido a almorzar (Trabajábamos en un preuniversitario en el campo), lancé mi declaración. La conversación solo se interrumpió por un colega que me preguntó si me iba en el recorrido de las cuatro (había otro a las seis), y me pidió que le llevara un encargo. Al regresar los demás, la conversación quedó inconclusa, la retomé cuando quedamos solos; a la hora de salir el recorrido, el colega se resistía a que me dejaran, me llamó, hizo que otros también me llamaran, ell chófer sonó el claxon... En vano ella me insistía en que me estaban esperando. La situación fue similar a la contada por Azorín en su cuento “DIEZ MINUTOS DE PARADA”, solo que en nuestro caso han sido mucho más que veinte años.
Recurso La vida nos ha demostrado cuánta razón tenía Martí al afirmar que “amor cuerdo, no es amor”. Los viernes de cada semana yo tenía que asistir a un curso de superación en la ciudad, la cual me quedaba muy distante. Yo terminaba a las 12m, pero como los deseos de verla destrozaron mi cordura, comencé a rrecorrer las calles en su espera. En ese intervalo me detuve a mirar la cartelera en el Cine Praga, a mi lado se detuvo una pareja, al hombre no le interesó y avanzó unos pasos, la muchacha se distrajo y tomó mi mano diciéndome “vamos, mi amor”, pero al ver que yo me mantenía más firme que las rocas del Morro, me miró y apenada se disculpó…mas el hombre, picado por el insecto de los celos, fue muy rudo.
Recurso Como nuestra unión era cada vez más fuerte, y al llegar San Valentín ya habíamos fijado fecha para la boda, por lo que uno de mis regalos fue este poema: Logré encontrarte en el silencio de una tarde, Cuando tu voz me enturbió el sentido, Tan solo al verte se rompió mi alarde, Y sin pensarlo recurrí a Cupido.
El Duende que travieso y atrevido, Listo el carcaj, disparó la flecha, Y en breve tiempo transcurrido, Entre tú y yo se fijó una fecha.
Nació el amor, Se hizo el milagro, Creció una flor En campo magro.
Y para concluir les confieso algo: después de 44 años, con dos hijas y cuatro nietos, seguimos siendo novios. Muchas gracias por haber leído hasta aquí, quedaré muy agradecido con sus comentarios. Invito a @mariolysnaranjo a que participen en la iniciativa Las fotos utilizadas fueron tomadas de pixabay.com. Texto traducido al inglés por Traductor de Google.
ENGLISH VERSION.
Dating blurs your sanity. @marpasifico's great idea for our #greenzone home. What do you have to share? Initiative #2. /… The topic reminds us of our youth.
Resource I remember that December day when, upon returning to my classroom after teaching a class, I was introduced to the new English teacher. I suddenly felt a shock. A few days later, taking advantage of the time when the rest of the teachers had gone to lunch (we worked at a pre-university school in the countryside), I made my statement. The conversation was only interrupted by a colleague who asked me if I was leaving on the four o'clock run (there was another one at six), and asked me to take an errand for him. When the others returned, the conversation was left unfinished, but I resumed it when we were alone. When it was time to leave for the run, the colleague refused to let me go. He called me, got others to call me too, and the driver honked his horn. In vain, she insisted that they were waiting for me. The situation was similar to the one described by Azorín in his story "TEN MINUTES OF STOP," only in our case, it was much longer than twenty years.
![](https://images.ecency.com/DQmbXW7WTgExCh8ufWxEWeo4EX9bnrXV1rfmnNtVwyytqf4/1761690937391.jpg
Resource Life has shown us how right Martí was when he said, "Sane love is not love." Every Friday, I had to attend a self-improvement course in the city, which was very far away. I finished at 12 noon, but since the desire to see her destroyed my sanity, I began to walk the streets waiting for her. During that interval, I stopped to look at the movie theater at the Praga Cinema. A couple stopped next to me. The man wasn't interested and took a few steps forward. The girl became distracted and took my hand, saying, "Come on, my love." But when she saw that I was standing firmer than the rocks at Morro, she looked at me and apologized, embarrassed... but the man, bitten by the jealousy bug, was very rude.
Resource As our union grew stronger, and by Valentine's Day we had already set a wedding date, one of my gifts was this poem: I managed to find you in the silence of an afternoon, When your voice clouded my senses, Just seeing you broke my boast, And without thinking, I turned to Cupid.
The mischievous and daring Goblin, With his quiver ready, shot his arrow, And in a short time, A date was set between you and me.
Love was born, The miracle happened, A flower grew In a lean field.
And to conclude, I have a confession to make: after 44 years, with two daughters and four grandchildren, we're still dating. Thank you so much for reading this far. I'd be very grateful for your comments. I invite @mariolysnaranjo to participate in the initiative. The photos used were taken from pixabay.com. Text translated into English by Google Translate.