La pólvora del ayer
Bélica canción del pasado, apresas mis pasos cansados en versos de tristes rimados.
Llueve una melodía furiosa que atormenta mi alma fogosa con recuerdos de estirpe dudosa.
Soy el hombre que no quise. Aún cuando por duda revise, hay notas de las que nunca me deshice.
Esta tempestad hecha sinfonía vale cada día mi agonía, y de hallar consuelo en la poesía.
¡Oh, bélica canción del pasado! Apresuras mis pasos encantados hacia un corazón agujereado.