
A quien no le gustaría estar en frente de un maravilloso atardecer como este, pues no se puede negar que este tipo de lugares te despierta este sentimiento de tranquilidad y paz que lleva a una serenidad deseada, y encuentras el espacio para organizarse mentalmente y simplemente detenerse a observar y escuchar como el ruido de las olas y el mar se mezcla con el sonido de las gaviotas.