Sobre una mano izquierda podemos observar dos esmaltes para uñas de distintos colores; la cual, le pertenecen a una mujer que, tras revisar entre varias marcas, por fin, se decidido en llevarse esos dos al tomar en consideración -según su juicio- la calidad y el precio.
Con determinación, se dirige a la caja para cancelar sus productos. Realiza la operación con normalidad. Recibe la factura. Verifica el monto total -con el que está de acuerdo dado que coincide con su cuenta. Se prepara para retirarse al dirigirse a las puertas del local. Ahí, se tropieza con una persona que lleva un modo de caminar algo torpe y con leve prisa. Algo que le genera malestar ya que, además del impacto del tropezón generado por parte de un hombre corpulento y alto es la falta de modales que se exhibe para ofrecer disculpas, y más ante una dama como ella. Aún así, la mujer continúa con su camino para visitar a las distintas tiendas del centro comercial.
Pero, apenas pasado un par de minutos se escuchan una serie de donaciones. Unos sonido que no le son familiares, y a los que trata de comparar con otros. Y lo más parecido son los fuegos artificiales para niños, con la diferencia de que estos se escuchaban algo secos y con ciertas pausas entre unos y otros.
Mira a su alrededor y nota que la gente corre despavorida, que gritan, y que sus rostros reflejan un suceso alarmante y estremecedor. A lo que, ella, sin pensarlo, también hace lo mismo. Siente que su vida podría correr peligro. Se va por los pasillos sin rumbo fijo.
Apenas pasadas unas horas se hizo viral la información por las redes sociales la noticia que nos ayuda a esclarecer lo acontecido: el asesinato de la encargada de una tienda que falleció al instante tras recibir varios disparos en el pecho y en la cabeza por parte de los que se presume ser un sicario.
English Version
On a left hand we can see two nail polishes of different colors; which, belong to a woman who, after reviewing among several brands, finally decided to take those two taking into consideration - according to her judgment - the quality and the price.
With determination, she heads to the checkout to cancel her products. Perform the operation normally. Get the bill. Check the total amount - which you agree with since it matches your account. He prepares to leave by heading to the doors of the premises. There, he bumps into a person who has a somewhat clumsy way of walking and in a slight hurry. Something that causes her discomfort because, in addition to the impact of the stumble generated by a corpulent and tall man, it is the lack of manners that is exhibited to offer apologies, and more so before a lady like her. Even so, the woman continues on her way to visit the various stores in the shopping center.
But, after a couple of minutes, a series of donations are heard. Some sounds that are unfamiliar to him, and to which he tries to compare with others. And the most similar are the fireworks for children, with the difference that these were heard somewhat dry and with certain pauses between one and another.
He looks around and notices that people are running in fear, that they are screaming, and that their faces reflect an alarming and shocking event. To which, she, without thinking, also does the same. He feels that his life could be in danger. He wanders through the corridors aimlessly.
Just after a few hours, the information on social networks went viral, the news that helps us clarify what happened: the murder of a store manager who died instantly after being shot several times in the chest and in the head by those who are presumed to be a hitman.
Notas del autor
Este relato forma parte del concurso convocado por la comunidad Top Family. Si deseas más información para poder participar debes de ingresar por el siguiente enlace:
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Fuente de las imagenes
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