En mis tiempos de bachillerato, me encantaba un verso de Pablo Neruda, “me gustas cuando callas porque estás como distante”, y parto del punto que en este verso no es la distancia, sino, el silencio; y siempre he sostenido que el silencio es netamente importante, pero, cuando comprendemos, cuál es el contexto adecuado para ser usado, existen silencios que pesan más que las palabras, siempre o casi siempre, nos vamos a encontrar atrapados entre nuestros pensamientos y emociones, esas que por alguna razón no se expresan verbalmente, hay #silencios cargados de significados, y aunque piensen que su silencio nunca va a dejarlos comunicarse, de un momento a otro se manifiestan en el cuerpo.
Tienen una brecha fuertísima nuestra mente y nuestro cuerpo, lo que no decimos, lo reprimimos o lo ignoramos, y aunque pensamos que todo queda ahí, en realidad nuestro silencio terminan gritando, ya sea en malestares físicos, tensión muscular o enfermedades somáticas, para algunos es habitual, el dolor físico, es el susurro de las emociones pidiendo a gritos un poco más de atención, es una llamada a emergencia, porque algo no está yendo bien. Nuestro cuerpo escucha lo que la mente calla, un punto visible es cuando tenemos insomnio, pues este se manifiesta cuando pensamos, no procesamos o reprimimos emociones. El estrés del trabajo, la ansiedad por situaciones económicas, el duelo por la pérdida y muchos otros factores preocupantes, se manifiestan en el cuerpo, dificultando el descanso, creando círculos fatigantes, malestar de espalda, retorsión de estómago y otros, todo depende de cada persona.
Comprendamos que nuestro cuerpo no necesita que hablemos para entendernos, él tiene su propia lengua, tiene vida propia, esa que a veces ignoramos, debemos aprender a escuchar nuestro cuerpo, porque escuchando aseguramos nuestro bienestar físico, tengamos presente que a veces respirar profundo, no es un simple acto físico, es un permiso para soltar aquello que no nos pertenece y liberar emociones guardadas en lo más profundo de nuestra mente, respirar nos ayuda a estar conectado con la persona más importante, nosotros mismos, es importante reconocer que estar bien no siempre significa estar fuerte, sino ser honestos con nosotros.

Autocompasión y #amor, son las dos cosas más importantes en el proceso de escucha interna, cuidemos nuestro cuerpo, hagámoslo como quien dedica horas a cuidar del jardín, con mucha atención, permitámonos sentir y expresar nuestras emociones, ya que así damos el primer paso a la sanación, sin olvidar que nuestro autocuidado no tiene que limitarse a la salud física, la salud emocional y mental es importante.
Prestar atención a nuestro cuerpo, es estar atentos con las señales que este nos envía, he aprendido de la juventud que la presión en el pecho no es que se avecina un infarto, es que la ansiedad es tan fuerte que nuestro cuerpo no puede con tan fatal contrincante, los hombros pesan cuando se carga con responsabilidades propias y ajenas, los problemas gastrointestinales salen a flote cuando no podemos con los acontecimientos de la vida, la cabeza duele porque la preocupación se instala como si se le olvidara que ella es una visita esporádica, se nos dificulta respirar, nos ahogamos cuando no podemos tener el control de las cosas, para los que se sienten fatigados en casa tengo dos, es la señal más fuerte de que estamos sosteniendo mucho y no tenemos paranza, las alergias son el reflejo del estrés y la frustración retenida por tanto tiempo; el aire libre es un buen espacio para ir desconectando, sentarnos a meditar o a desconectar nuestra mente, nos carga de un silencio y una paz que aunque a veces pensamos que no son necesarias, ayudan a encontrar la tranquilidad.
Saben cada día me lo repito como si fuera una lección del bachillerato, debemos aprender a validar nuestros sentimientos y aceptarlos, ya sean negativos o positivos, la aceptación es el primer paso hacia el bienestar, validamos que existen, que son importantes, le damos su tiempo y el hecho de solamente aceptar, nos enseña a que al final del día nuestros sentimientos no pueden ser una carga pesada y que no debemos arrastrar con ellas solo vivirlas. El cuerpo escucha lo que la mente calla, aunque nosotros solo nos demos cuenta cuando nos duele la nada alguna parte del cuerpo, nuestro silencio emocional tiene un impacto significativo en nuestra salud física, #mental y #emocional, #aprender a escuchar nuestro cuerpo y atender cada una de sus carencias, nos ayuda a cultivar una relación más saludable con nosotros mismos, tomemos una pausa, respiremos hondo y sentémonos a escuchar a nuestro cuerpo.

El Dolor Físico es el Susurro de las Emociones
@ilvecchio-jo
· 2025-10-31 12:20
· Holos&Lotus
#liketu
#holos
#spanish
#reflections
#creativecoin
#ecency
#neoxian
#silencios
Payout: 8.275 HBD
Votes: 139
More interactions (upvote, reblog, reply) coming soon.