Hello hivers. How are you? Today I'm going to continue the post about my kitties Mikan and Maneki. Today they discovered a window, where they could climb up and gossip from. Oh yes, because they're tremendous gossips.
Here I'm showing you a sequence of photos I captured in that moment of wonder and discovery, where the whispering of the sparrows perched on the anon bush very close to that window prevails. Since the first post about them, I had mentioned that every day they look out from the living room window, from the edge of the sofa. Only I hadn't told you that they see everyone who passes by on the street, like a man talking too loudly on his cell phone or the pigeons perched on the electric pole trying to get attention. Or a child urging his mother to walk faster so he can get to school on time. Or a street vendor shouting at the top of her lungs: chlorine, chlorine. Hahaha. These kitties are gossipy. And they never tire. The cutest thing is that they miss us too, because when we return, they meow at us. They touch the edges of the window, trying to catch our fingers, and they meow in a louder voice: meow, meow, meow.
That's all for this post about my kitties. I hope you enjoyed it. I'll be waiting for more pet stories ☺️ 😸🐰🦝🐶🐣 in this lovely community and on Hive.
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Hola hivers. Cómo están? En el día de hoy les voy a continuar el post sobre mis michis Mikan y Maneki. Hoy descubrieron una ventana, donde se podían subir y chismosear desde ella. Ah sí, porque son tremendos chismosos. Aquí les muestro una secuencia de las fotos que capturé en ese momento de asombro y descubrimiento, donde primo el susurro de los gorriones que estaban posados en la mata de anon muy cerca de esa ventana. Desde el primer post sobre ellos les había comentado que todos los días miran desde la ventana de la sala, desde el borde del sofá. Solo que no les había contado que ven pasar a todo el que pasa por la calle, dígase un señor hablando demasiado alto desde su móvil o las palomas posadas en el poste eléctrico tratando de llamar la atención. O un niño apurando a su mamá para que camine más rápido para poder llegar a tiempo a su escuela. O una vendedora ambulante gritando a todo pulmón: el cloro, cloro. Jajaja. Son chismositos estos gatitos. Y no se cansan. Lo más bonito del caso es que también nos extrañan pues cuando regresamos nos maullan. Tocan los bordes de la ventana tratando de atrapar nuestros dedos y maullan aumentando el tono: miau, miauu, miauuuuuu Hasta aquí les dejo este post de mis mininos. Espero que les haya gustado. Los espero con más historias de mascotas ☺️ 😸🐰🦝🐶🐣 en esta linda comunidad y por Hive.
Todos los derechos reservados Contenido original. Texto e imágenes creadas por mí. Alcatel modelo 5029E Traducción: Google translate