n this photo series, I capture the hands of a young pianist who brought an unexpected twist to the stage—a playful and elegant piano version of the iconic Super Mario Bros. theme.
With every note, nostalgia and sophistication intertwined, proving that video game music can be just as beautiful and complex as any classical piece. The delicate reflections on the piano surface echo his passion and precision, while his rhythm transported us to the colorful worlds of our childhood.
This is a tribute to those who transform simple moments into unforgettable performances, blending fun and elegance through music.
En esta serie de fotos, capturo las manos de un joven pianista que trajo al escenario un giro inesperado: una versión divertida y elegante del icónico tema de Super Mario Bros. en piano.
Con cada nota, la nostalgia y la sofisticación se entrelazaron, demostrando que la música de los videojuegos puede ser tan hermosa y compleja como cualquier pieza clásica. Los delicados reflejos en la superficie del piano reflejan su pasión y precisión, mientras su ritmo nos transportó a los coloridos mundos de nuestra infancia.
Este es un homenaje a quienes transforman momentos simples en presentaciones inolvidables, combinando diversión y elegancia a través de la música.
