Mi entrada al concurso “Observa, piensa, escribe” El ojo que te ve (Esp-Eng)

¡Saludos, comunidad de #Top Family! Aquí les dejo mi participación en el concurso “Observa, piensa, escribe”.

Imagen propiedad de @Ianjoseg

Dice un viejo refrán “Pueblo chiquito, infierno grande”. Comienzo de esta manera mi post porque la realidad es que, en las grandes ciudades, las personas viven tan agitadas que no tienen tiempo de mirar a su vecino. Pero si a usted, como a mí, le tocó vivir en una ciudad de dimensiones pequeñas, entonces sabrá perfectamente de lo que hablo. En los pueblos pequeños usted no puede dar un paso sin que los ojos del barrio la persigan y las dueñas de los ojos murmuren (a veces no se trata solo de mujeres, cuando se da en los hombres, es algo mucho peor).

El concurso de esta semana nos convoca a observar la imagen de un ojo que nos mira de manera dura, nos convida a pensar y a escribir. A mi mente llegan los versos del poeta español Antonio Machado: El ojo que ves no es/ ojo porque tú lo veas;/ es ojo porque te ve. Cuánta razón tenía el escritor. Sobre nosotros se ciernen de manera inevitable las miradas de otras personas. Ello no solo ocurre en su vecindad, lo mismo sucede en su oficina, en los sitios que frecuenta, etc. Hay personas que le restan importancia y dicen “yo no vivo con esa gente”; pero ¿qué sucede en realidad?

Pues les digo, queridos Hivers, que todos tenemos una imagen que mostrar al mundo. Incluso si usted es una persona auténtica, desenfadada, única… piense un poco y verá que hay un espacio seguro, una zona de confort en la que sí puede ser usted misma. Por lo general, esta zona es su espacio íntimo, privado. Pero frente a los ojos de los demás asumimos papeles que nos van imponiendo la cultura, la sociedad. En dependencia de esos roles que jugamos nos comportamos de diversas maneras, usamos un tipo de lenguaje, de vestimenta, de gestos corporales. Estos modos suelen relajarse en nuestro espacio de confianza.

A veces sería bueno pasar inadvertidos. Hay personas que te miran con mala energía, que no se alegran de tus logros, que disfrutan ver tus caídas. Hay personas que llevan en el rostro y particularmente en sus miradas la maldad. Sin embargo, hay otras que te hacen vibrar alto, que tienen una mirada bondadosa y tú conectas con ellas casi desde que las conoces.

Creo que lo más importante es ser coherentes con nosotros mismos e intentar por todos los medios darle cabida en nuestro pensamiento solo al segundo tipo de personas. Es realmente imposible pretender quedar bien con todos y la verdad es que la vida tampoco se nos puede ir en tal afán. Entonces, amigos, dejemos que los ojos nos observen y sigamos siendo nosotros mismos. Al final, la verdad siempre se impone y una mirada inquisidora puede convertirse en un punto de partida para mejorar.

Piense en el número de veces que una crítica nos hizo mirarnos por dentro o poner en una balanza las cosas que realmente importaban. Porque, al final, no somos ni seremos monedas de oro para caerles bien a todos, y siempre podemos encontrar algún ojo que nos moleste. Como solía decir mi abuelita “de que los hay, los hay”.

Me gustaría conocer sus opiniones.

¡Gracias por leer mi post! 💙

Estimada Comunidad, declaro que escribí este post sin ayuda de la IA. Las imágenes me pertenecen y los banners fueron creados en Canva, por @yuraimatc.

Greetings, #Top Family community! Here is my entry for the “Observe, Think, Write” contest.

Image property of @Ianjoseg

An old saying goes “Small town, big hell.” I’m starting my post this way because the reality is that, in big cities, people live such a hectic life that they don’t have time to look at their neighbors. But if you, like me, happened to live in a small city, then you’ll know exactly what I’m talking about. In small towns, you can’t take a step without the eyes of the neighborhood following you and the owners of the eyes murmuring (sometimes it’s not just women; when it happens to men, it’s much worse).

This week’s contest calls us to observe the image of an eye that looks at us harshly, inviting us to think and write. The verses of the Spanish poet Antonio Machado come to mind: The eye you see is not/ an eye because you see it;/ it is an eye because it sees you. How right the writer was. The gaze of others inevitably falls upon us. This doesn't just happen in your neighborhood; the same happens in your office, in the places you frequent, etc. Some people downplay it and say, "I don't live with those people." But what's really going on?

Well, I tell you, dear Hivers, that we all have an image to show the world. Even if you are an authentic, easygoing, unique person... think about it for a moment and you'll see that there is a safe space, a comfort zone where you can be yourself. Usually, this zone is your intimate, private space. But in the eyes of others, we assume roles imposed on us by culture and society. Depending on the roles we play, we behave in different ways, we use a certain type of language, dress, and body language. These modes tend to relax in our space of trust.

Sometimes it would be nice to go unnoticed. There are people who look at you with negative energy, who aren't happy about your achievements, who enjoy seeing your downfalls. There are people who carry malice on their faces, and particularly in their gazes. However, there are others who make you vibrate high, who have a kind gaze, and you connect with them almost from the moment you meet them.

I think the most important thing is to be consistent with ourselves and try our best to make room in our thoughts only for the second type of people. It's truly impossible to expect to please everyone, and the truth is that life can't be wasted in such a rush. So, friends, let's let our eyes observe us and continue being ourselves. In the end, the truth always prevails, and a searching gaze can become a starting point for improvement.

Think of the number of times a critic made us look inside ourselves or weigh the things that truly mattered. Because, in the end, we aren't and never will be golden coins to be liked by everyone, and we can always find someone to bother us. As my grandmother used to say, "That there are, there are."

I'd like to hear your opinions.

Thanks for reading my post! 💙

Dear Community, I declare that I wrote this post without help from AI. The images belong to me and the banners were created in Canva, by @yuraimatc.

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