MAKTUB( PALABRA ARABE ): Cuando dos almas están destinadas a conectar no importa el tiempo que pase siempre existe una forma mágica de que esto suceda.

El reloj de arena de la vida, con su implacable goteo, me había enseñado una verdad dolorosa: la soledad es el precio inevitable de la individualidad, del orgullo y el resentimiento.Creía, con la certeza amarga de quien ha visto desmoronarse castillos de arena, que estábamos condenados a ser islas, flotando en un océano vasto e incomunicado, observando a lo lejos las luces de otros faros, sin poder alcanzar su calor.
Solo que en ese entonces no lo conocía...
Su nombre, Dariel, irónicamente perfecto para mi . En la profundidad de sus ojos color cielo, descubrí un universo intrincado de pensamientos y emociones que me invitaba a perderme, a explorarlo sin miedo a no encontrar la salida.
Lo conocí un día de abril. Fue un curso de Cámaras y fotografías el protagonista de que esta historia comenzará a escribirse. También la profe Olga Lidia, compañera de trabajo y directora de programa tuvo su participación, cuando aquel día mandó la tarea en equipo, del spot de 45 segundos. Luego estuve yo que de atrevida decidí cambiar de equipo de estudio . Ahí estaba él.No hubo un flechazo instantáneo, ni una explosión de fuegos artificiales. Nada de eso sucedió. Fue algo más sutil, más profundo. Sus ojos se cruzaron con los míos y, por un instante, sentí que mi alma se reflejaba en ellos, desnuda, sin máscaras y sin defensas.

Comenzamos a hablar, mejor dicho a chatear, era la tarea motivo de que las horas en nuestro celular parecieran minutos. Poco tardamos en descubrir que compartíamos muchos gustos similares . Pero más allá de las coincidencias superficiales, existía una conexión que trascendía las palabras.Dariel me entendía. El veía más allá de mi, directamente a mi alma, con una mirada que no sentenciaba, sino que aceptaba. Y en esa aceptación, encontré la valentía para mostrarle mis propias heridas, mis propias cicatrices. Poco a poco fuimos compartiendo nuestros miedos, nuestras dudas y nuestras esperanzas. En su compañía, la soledad dejó de ser un peso opresivo y se transformó en un espacio de reflexión, un lugar donde podíamos ser nosotros mismos. Con él, aprendí que la verdadera conexión no se basa en la perfección, sino en la aceptación mutua de nuestras imperfecciones. Dariel me enseñó que el amor no es un escape de la soledad, sino una forma de abrazarla, de comprenderla, de transformarla en algo hermoso. Me mostró que dos almas pueden unirse no para fundirse en una sola entidad, sino para complementarse, para apoyarse y para crecer juntas.

Nuestra relación no es un camino de rosas. Hay momentos de dificultad, de desacuerdo, de incertidumbre, de peleas y discusiones. Pero incluso en la tormenta, nuestra conexión se mantiene firme, anclada a eso en lo que creemos, "el amor".
Con el tiempo, he aprendido a amarlo no por lo que es para mí, sino por lo que es en sí mismo: un hombre fuerte que ha atravesado por mucho, inteligente, sensible aunque a veces parezca que no, con un corazón que no le cabe en el pecho y una visión del mundo que me inspira a ser mejor persona. Nunca se lo he dicho, pero me encantan sus rizos imperfectos, la manera en que ríe cuando le hago cosquillas, como me mira cuando estoy entretenida e incluso hasta cuando se pone bravo porque quiere cocinar él. Nunca se lo he dicho pero amo todo de él.

Hoy, después de un tiempo juntos, puedo decir con certeza que Dariel es mi hogar. No un hogar físico, sino un hogar del alma. Un lugar donde me siento segura, amada, aceptada, donde puedo ser yo misma, sin miedo a ser juzgada.
He llegado a creer que quizás no estamos condenados a la soledad. Tal vez la clave está en dejar de buscar la perfección y empezar a valorar la conexión, la empatía, la capacidad de ver el alma del otro. Tal vez, la verdadera suerte reside en encontrar a esa persona especial que nos acoge tal como somos, con nuestras luces y nuestras sombras, y que nos ayuda a navegar por el laberinto de la vida, tomados de la mano. Quizás este no sea mi final feliz, pero ahora se siente tan real que parece un felices para siempre.

* Texto de mi propia creación
* Texto traducido por: All language translate app
* Las imágenes utilizadas son de mi galeria
* Diseño de collage:Canva
English version👇
Maktub (Arabic Word): When two souls are intended to connect, it doesn't matter how time passes there is always a magical way that this happens.
The sand watch of life, with its relentless drip, had taught me a painful truth: loneliness is the inevitable price of individuality, pride and resentment. I said, with the bitter certainty of those who have seen sand castles crumble, which we were sentenced to being islands, floating in a vast and incommunicado ocean, observing in the distance the lights of other headlights.
Only at that time I didn't know him ...
His name, Dariel, ironically perfect for me. In the depth of his heaven eyes, I discovered an intricate universe of thoughts and emotions that invited me to lose myself, to explore it without fear of not finding the exit.
I met him an April day. It was a course of cameras and photographs that this story will begin to be written. Also the teacher Olga Lidia, a work partner and program director had her participation, when she sent the team task, of the 45 seconds spot. Then I was daring I decided to change the study team. There was him. There was no instant arrow, nor an explosion of fireworks. None of that happened. It was something more subtle, deeper. His eyes crossed with mine and, for a moment, I felt that my soul was reflected in them, naked, without masks and without defenses.
We started talking, rather to chat, it was the task that the hours on our cell phone seem minutes. We will take long to discover that we shared many similar tastes. But beyond superficial coincidences, there was a connection that transcended words.
Dariel understood me. He saw beyond me, directly to my soul, with a look that I did not sentenced, but accepted. And in that acceptance, I found courage to show my own wounds, my own scars. Little by little we shared our fears, our doubts and our hopes. In his company, loneliness ceased to be an oppressive weight and became a space for reflection, a place where we could be ourselves. With him, I learned that the true connection is not based on perfection, but on the mutual acceptance of our imperfections. Dariel taught me that love is not an escape from loneliness, but a way of hugging it, of understanding it, of transforming it into something beautiful. He showed me that two souls can join not to merge into a single entity, but to complement each other, to support and grow together.
Our relationship is not a rose path. There are moments of difficulty, of disagreement, of uncertainty, of fights and discussions. But even in the storm, our connection remains firm, anchored to that in what we believe, "love."
Over time, I have learned to love him not because of what it is for me, but for what it is in himself: a strong man who has gone through much, intelligent, sensitive although sometimes it seems not, with a heart that does not fit in his chest and a vision of the world that inspires me to be a better person. I have never told him, but I love his imperfect curls, the way I laugh when I tickle him, as he looks at me when I am entertaining and even when he gets brave because he wants to cook him. I have never told him but I love everything.
Today, after a while together, I can say with certainty that Dariel is my home. Not a physical home, but a home of the soul. A place where I feel sure, loved, accepted, where I can be myself, without fear of being judged.
I have come to believe that perhaps we are not condemned to loneliness. Perhaps the key is to stop looking for perfection and start assessing the connection, empathy, the ability to see the soul of the other. Perhaps, true luck lies in finding that special person who welcomes us as we are, with our lights and our shadows, and that helps us navigate the labyrinth of life, taken by hand. Maybe this is not my happy ending, but now you feel so real that it looks like a happy forever.
MAKTUB ( Esp//Eng)
@lupetorres
· 2025-09-15 21:42
· Holos&Lotus
#hive-131951
#spanish
#english
#vidapersonal
#amor
#reflexion
#fotografias
#conexion
#estilodevida
#pareja
Payout: 0.000 HBD
Votes: 8
More interactions (upvote, reblog, reply) coming soon.