I don't even know what the right word is here, because shocked doesn’t quite cut it. Honestly, I don’t even know why I’m surprised—maybe I should have seen it coming. People I once considered sensible are now openly advocating for the return of monarchies.

Yes, I know how that sounds. Hyperbolic, dramatic, whatever. But I’m being as serious as a heart attack. What am I talking about, you ask? Oh, nothing major—just the casual re-writing of constitutions so certain people can stay in power indefinitely. I wish I were joking. I really do. But before you think I’ve fallen for some fake news rabbit hole, allow me to present some evidence.

Now, context matters, and I’m not blind to it. The person behind that tweet—and her husband, good ol’ Max Keiser—are currently living in El Salvador. Living the life, really. With one foot in the government and the president’s ear, they’ve never had it this good. So yes, their motivations are, to put it mildly, quite transparent.

Still, I expected to scroll down to the comment section and see people pushing back. Something. Anything. And look, I’ve spoken about Bukele before. I’ve even called his administration something close to a miracle for Latin America. But never—never—did I think I’d see people cheering for him to become a monarch. I didn’t expect so many to be okay with such a blatant regression, with the kneecapping of democratic values, and the re-centralization of power into the hands of a few elites. But alas, here we are.

I also feel like I have to say this, because otherwise my little rant won’t feel complete: I never imagined people would merge the fallacy of authority with AI dependency. Seriously—doesn’t it feel intellectually rotten to say, “It must be true, the AI told me”? That’s not just lazy thinking, it’s surrender. It’s admitting intellectual defeat in a way that words barely capture. At least, not any words being typed by my fingers.

At any rate, I hope—for the sake of whatever future we still have—that this road we’re on is cut short by some kind of revolution. Because if we keep walking like this, the era of kings won’t just return. It’ll be cemented by technologies that make their thrones unshakable for generations to come.

Is this how democracy ends? Not with a bang, but with a technocracy?

Wow... what else can I possibly say?

wow...

MenO

Spanish Translation

¿El regreso del Rey? Cuando las élites tecnológicas coquetean con las coronas

No sé cuál es la palabra correcta aquí, porque sorprendido no alcanza. La verdad es que ni siquiera sé por qué me sorprende, pero supongo que debí haberlo visto venir. Personas que alguna vez consideré sensatas ahora están defendiendo abiertamente el regreso de las monarquías.

Sí, ya sé cómo suena. Hiperbólico, dramático, lo que sea. Pero hablo con la seriedad de un infarto. ¿De qué estoy hablando? Ah, nada importante… solo de la reescritura de constituciones para que ciertas personas puedan quedarse en el poder indefinidamente. Ojalá estuviera bromeando. De verdad. Pero antes de que pienses que caí en alguna noticia falsa, permíteme mostrarte algo.

Entender el contexto siempre importa, y no estoy ciego a ello. La persona detrás de ese tuit—y su esposo, el buen Max Keiser—viven actualmente en El Salvador. Viven la vida, por así decirlo. Con un pie en el gobierno y el oído del presidente, nunca la han tenido tan fácil. Así que sí, sus motivaciones son, por decirlo suavemente, bastante transparentes.

Aun así, pensé que al bajar a la sección de comentarios encontraría objeciones. Algo. Lo que sea. Y mira, ya he hablado de Bukele antes. Incluso he dicho que su gobierno parece el milagro de América Latina. Pero jamás, jamás, pensé que vería a gente celebrando que se convierta en un monarca. No esperaba que tantos estuvieran de acuerdo con una regresión tan clara, con la mutilación de los valores democráticos, y con la recentralización del poder en manos de una élite. Pero en fin, aquí estamos.

Y también siento que tengo que decir esto, porque si no lo hago, mi pequeño rant no se siente completo: jamás imaginé que la gente combinaría la falacia de autoridad con la dependencia de la IA. ¿No te parece intelectualmente repulsivo decir "debe ser cierto, lo dijo la IA"? No es solo pensar con pereza. Es rendirse. Es admitir la derrota intelectual de una forma que casi no se puede describir con palabras. Al menos no con palabras escritas por estos dedos.

En fin, espero—por el bien de la humanidad—que este camino se interrumpa con algún tipo de revolución. Porque si seguimos avanzando, la era de los reyes no solo volverá, sino que será reforzada por tecnologías que aseguren sus tronos por generaciones.

¿Así es como termina la democracia? ¿Con una tecnocracia?

Wow… ¿qué más se puede decir?

wow…

MenO