Frente a la inmensidad en medio de noches despiadadas que se antojan eternas siendo un punto congelado que se mueve para seguir en el mismo lugar asaltan mil dudas los sueños son consumidos y las ganas de rendirse tientan.
Allí, de lo más oscuro brilla la esperanza y se multiplica, nace la luz adquiero conciencia, entonces llegan las fuerzas renovadas firmes para seguir viviendo empezar a vivir y aprender a hacerlo.