Hola mis apreciados amigos.
En el evangelio nos encontramos con el relato de Bartimeo, llamado el ciego, una persona marginada por todos, sentado a un lado del camino , que al escuchar que quien pasaba era Jesus, comenzo a clamar por misericordia, al punto que le ordenaban callar, ante sus gritos para obtener la atencion del Senor, pero estaba decidico a lograr su cometido y por lo tanto gritaba desesperadamente , pues tenia la certeza que la salvacion estaba a su alcance y no estaba dispuesto a dejar escapar la oportunidad que se le presentaba.
En el instante que obtuvo la atencion y aprobacion del Maestro; Bartimeo dejo todo y de un salto se abrió camino y se acerco a Jesús. Seguramente pensó: soy ciego pero no me voy a quedar así y es alli donde comienza a sanarse, desde que decide ir al encuentro de Dios.
Para seguir a Jesus debemos depojarnos de todo aquello que nos ata.
Aprendamos del ciego a no dejarnos influenciar por las voces del desaliento, de la incredulidad , barreras que nos ponen o que muchas veces nos colocamos a nosostros mismos y clama con valentia por ese encuentro y por un milagro en nuestra vida.
Bartimeo sabia cual era la necesidad que requeria ser solucionada y cuando Jesus se lo pregunto ,inmediatamnte y sin rodeos respondio : Maestro que pueda ver.
Hoy te pregunto: ¿Sabes cual es tu verdadera necesidad?.
Digamos confiados a Jesus , entra en mi vida , dame luz, para mis ojos y mi alma; Senor ensename a ver el camino, ayudame a caminar, guia mis pasos ; que mi ceguera no justifique mi estilo de vida, que no sea yo complaciente a las injusticias. Por el contrario que pueda penetrar todas las cosas y acciones con tu presencia, que logre hacer que te vean a ti.
Gracias por tomarte unos minutos de tu tiempo y leerme.
Bendiciones para todos.