Iniciativa Historia de los discos de vinilo/ Los discos de vinil de mi juventud (Esp/E

#### Saludos amigos ***  *** Qué bonitos recuerdos me trae esta iniciativa del mes de la comunidad Hiveargentina: **Historia de los discos de vinilo**. Puedo decirles que durante gran parte de mi juventud los discos de vinilo eran la manera como podía tener la música que quería escuchar y repetirla cuantas veces quisiera, a diferencia de la radio donde la música se selecciona buscando en el dial una emisora donde esten poniendo las canciones que uno quiere escuchar. Yo prefería, por supuesto, tener mis discos. En mi casa hubo varios tocadiscos que se iban cambiando de acuerdo al avance de la tecnología. Me gustaba escuchar diferentes cantantes y ritmos musicales. Tenía varios discos de Mercedes Sosa, de música tradicional venezolana , orquestas de salsa como la Fania All Star y Rubén Blades entre mis favoritos. Pero en mi casa se escuchaba todo tipo de música, pues mi papá, mi mamá y cada una de mis cuatro hermanas tenían sus gustos muy particulares. Por ejemplo, mi hermana mayor era una apasionada de Joan Manuel Serrat y tenía una colección de sus discos que a mí también me encantaba escuchar. ***  [fuente](https://pixabay.com/es/photos/l%C3%A1mina-disco-de-vinilo-registros-4725349/) *** A mi papá le gustaban los boleros y la música llanera y cada primero de enero era el momento de poner sus discos y había uno en especial que escuchaba varias veces. Era de un cantante de música llanera llamado El Cazador Novato. A mí me encanta la música llanera con cuatro, arpa y maracas. Pero este cantante a ninguna de nosotras nos gustaba y dejábamos a mi papá solo en la sala mientras huíamos a los cuartos. Mi padre tenía un disco pequeño, de esos que traían una canción en cada lado. En este eran dos poemas del poeta venezolano Andrés Eloy Blanco, recitados por el mismo autor. Por un lado, del disco estaban Angelitos Negros y, por el otro lado, la loca Luz Caraballo. Mi mamá se lo prestó a su vecina, amiga y comadre. Ella nunca se lo regresó y mi mamá, angustiada por el valor que tenía para mi papá, además de su valor histórico, se lo pidió varias veces,  pero ella insistió en que ya se lo había regresado. El disgusto de mi papá y con razón fue muy grande y él responsabilizaba a mi mamá por haberlo prestado. Cosas que pasan en la vida, eso sucede mucho cuando prestas un libro;  generalmente, al pasar el tiempo lo das por perdido. ***  [fuente](https://pixabay.com/es/photos/vinilo-coleccion-disco-retro-3290318/) En mi casa fueron quedando guardados los discos que dejaron de escucharse, desplazados primero por los casetes y luego por los CDs. Yo no me llevé ninguno cuando dejé el hogar y hoy me duele no haberlo hecho, pues mi hermana menor, que se quedó viviendo allí con mi madre después de la muerte de mi padre, los regaló junto con todo lo que había en una vitrina. Lo único que quedó fue un álbum de música latinoamericana que mi padre había comprado. ***  [fuente](https://pixabay.com/es/photos/mujer-vinilo-cl%C3%A1sico-5894819/) *** Los discos de vinilo son parte de un pasado donde escuchar la música era todo un proceso. Sacar el disco del cartón donde venían guardados, colocarlo en el tocadiscos, poner la aguja en la primera canción o tenías la opción de colocarla en la que querías escuchar y ponerlo a funcionar. Mientras el disco daba vueltas, se escuchaba el sonido como por arte de magia. Esos tocadiscos también tenían la opción de cambiar la velocidad de las revoluciones por minuto. Los discos grandes eran de 33 rpm y los pequeños o tambien llamados sencillos, eran de 45 rpm, mas rápida. De niñas nos divertíamos escuchando la música en esa revolución en los discos grandes. La voz del cantante se oia muy graciosa. Son recuerdos de un pasado, la tecnología va cambiando rápidamente y con esta el modo de vida. ***  Gracias a la comunidad Hiveargentina por esta iniciativa en la que tuve el gusto de psrticipar. Acá dejo el [enlace](https://hive.blog/hive-161447/@hiveargentina/biqekayn) e invito a mis amigos @katleya y @germanandradeg a contarnos sus historias. ***  *** Greetings, friends! This month's initiative brings back such fond memories! I can tell you that for much of my youth, vinyl records were the only way I could listen to the music I wanted and play it over and over again, unlike the radio, where the music was selected by searching through the different stations to find my favorite. Of course, I preferred to have my own records. At home, we had several record players that changed as technology advanced. I liked listening to different singers and musical rhythms. I had several records by Mercedes Sosa, traditional Venezuelan music, salsa orchestras like the Fania All Star Orchestra, and Rubén Blades among my favorites. But at home we listened to all kinds of music, because my dad, my mom, and each of my four sisters had their own particular tastes. For example, my older sister was passionate about Joan Manuel Serrat and had a collection of his records that I also loved to listen to. ***  [fuente](https://pixabay.com/es/photos/l%C3%A1mina-disco-de-vinilo-registros-4725349/) *** My dad liked boleros and llanera music, and every January 1st was the time to play his records, and there was one in particular that he listened to over and over again. It was by a llanera singer called El Cazador Novato. I love llanera music with cuatro, harp, and maracas. But none of us liked this singer, and we would leave my dad alone in the living room while we fled to our rooms. My father had a small record, one of those that had a song on each side. This one had two poems by the poet Andrés Eloy Blanco, recited by the author himself. On one side of the record was Angelitos Negros and on the other side was La loca Luz Caraballo. My mother lent it to her neighbor, friend, and godmother. She never returned it, and my mother, distressed by its value to my father, as well as its historical value, asked for it back several times, but she insisted that she had already returned it. My dad was understandably very upset and blamed my mom for lending it out. These things happen in life, and it happens a lot when you lend a book; usually, as time goes by, you give it up for lost. ***  [fuente](https://pixabay.com/es/photos/vinilo-coleccion-disco-retro-3290318/) *** The records that were no longer listened to were stored in my house, displaced first by cassettes and then by CDs. I didn't take any with me when I left home, and today I regret not having done so, because my younger sister, who stayed there with my mother after my father's death, gave them away along with everything else in a display case. The only thing left was an album of Latin American music that my father had bought. ***  [fuente](https://pixabay.com/es/photos/mujer-vinilo-cl%C3%A1sico-5894819/) *** Vinyl records are part of a past where listening to music was a whole process. You had to take the record out of the cardboard sleeve it was stored in, place it on the turntable, put the needle on the first song, or you had the option of placing it on the one you wanted to listen to and start it up. As the record spun, the sound came out as if by magic. Those record players also had the option of changing the speed of the revolutions per minute. The normal speed was 33 and 45 was faster. As children, we enjoyed listening to music at that speed. The singer's voice sounded funny. These are memories of the past. Technology is changing rapidly, and with it, our way of life. Thanks to the Hiveargentina community for this initiative. Here is the [link](https://hive.blog/hive-161447/@hiveargentina/biqekayn) and I invite my friends @katleya and @germanandradeg to participate. ***  La imágen de la presentación la edite en Canva con una fotografia de Egle_pe de Pixabay. La traducción al ingles la realicé en www.deepl.com