Today I'm here to vent properly. I've been thinking for days, holding it in, swallowing thickly, taking deep breaths and appealing to all the mantras I can think of, the ones I remember and the ones I have written down somewhere. I, as those who know me know, am a person of resistance. When something bothers me, makes me uncomfortable or generates some negative feeling, I try to avoid it, to push it aside or simply to ignore it. Why? Because I hate conflicts, misinterpretations of what I say and the fact that the counterpart always tends to crumble the words, taking them out of context and accommodating them to their offended thoughts.

Many know (because I made a post or two saying how happy I was) that my brother was coming home to live with his wife for personal reasons. I was overjoyed because my son and I would no longer be so lonely, we would have the company of wonderful people. They arrived last January 5. Everything was fine, we were all happy. According to my brother (and I say "according to him", because when I have spent some time with them in their house in Margarita Island, where they lived, I never saw her do it) my sister-in-law is an obsessive cleanliness freak. In the two months in a row that I lived with them a long time ago, I only saw her clean where the King passes by (you know, the visible parts). My mother and I always kept the kitchen, our bathroom and our bedroom in order. I had a hard time because my belly (I was 8 1/2 months pregnant) made me feel exhausted and breathing was difficult.

Well, there, in her house, we kept in order everything we dirtied and the common area. But always respecting their rules, their bases because, as the saying goes, everyone has their own way of killing lice. When mom and I cleaned up, it was when she went to work. That way we were out of the way and we could clean as we pleased, using our own cleaning products. Here at my house, I, like her at hers, have my own rules. But I'm very relaxed. I'm not a neat freak, but after cooking, I have the habit of picking up, cleaning the kitchen and leaving everything in order. The same with the bathroom. I clean it once a week because it's just me and my son. I keep my bedroom the same. I make my bed every morning as soon as I open my eyes. But more than a hobby, it's a habit I've had since I was a little girl.

I don't brag about how much cleaning I did, how I did it, how exhausted I got, and I don't do it in front of anyone because I'm not interested in proving anything. I usually cook after they make their meal and then, before I sit down to eat, I scrub the pots and pans and everything else I used. After eating, I wash my plate, my son's plate and clean the stove and the kitchen in general. This has resulted in absurd discontent on their part. They walk around with an angry expression on their face. Last Saturday, my brother asks me why I have to call the lady who does my cleaning, if _I must clean_ because it is my house and that I cannot "pretend" that his wife does it, because she is not my employee.

I was in one piece because that's not what's been going on. She told me that I had to do my stuff and I told her very calmly that I clean constantly (which is whenever I feel like it, well 😠. Or as I told you, according to my schedule and when they are not at home). His answer was: I haven't seen you! That is... I told him that he didn't have to see me doing it because I did it when they weren't around. The truth is that yesterday was my day off from work and taking advantage of their absence, I did my cleaning of the bathroom, bedroom and kitchen and washed the shower curtain. Very relaxed and at my own pace. The thing is that they went back to look for something and found all this. In their faces was reflected the sorrow that they were judging me and that they had done nothing thinking badly of me.

I have come to feel like an intruder in my own home, to the point of coming home from work and locking myself in my room and going out only for the basics (making a quick snack, taking a shower, etc.). I don't understand why they can't adapt to my way of life. It's a matter of team building, not looking for flaws or who works more or who does less around the house. I really don't care if they clean or not because I do it and I'm not trying to look at anyone's shortcomings. I do it automatically and I don't have a set day or time for it, I do it when no one is home because it's more comfortable for me. What bothers me is when they say that I am waiting for them to solve me and keep the space clean and even feel offended by that 😮 and in that they miss the time, they get poisoned, they create an unpleasant environment with an energy of anger and conflict.

Today things were better because after seeing what I was doing yesterday, they had to keep their tongues inside where the sun doesn't shine 😫 and today they behaved relatively well. The point is that I start to think that in my eagerness to try to preserve peace in my home at all costs, I accept and tolerate this kind of attitudes and judgments from them. Perhaps I am very permissive for the same reason of not wanting to enter into sterile counterpoints or diatribes. I trust that time and facts will prove me right. For now I needed to get out of this situation that had me quite uncomfortable. I've let it out, I've got it off my chest 😊.

Hoy vengo a desahogarme como Dios manda. Llevo días pensando, aguantando, tragando grueso, respirando profundo y apelando a todos los mantras que se me ocurran, los que recuerdo y los que tengo anotados por algún lado. Yo, como saben quiénes me conocen, soy una persona de resistencia. Cuando algo me molesta, me incomoda o me genera alguna sensación negativa, trato de evadirla, de hacerla a un lado o simplemente de ignorarla. ¿Por qué? Porque detesto los conflictos, las malas interpretaciones de lo que diga y el hecho de que la contraparte siempre tiende a desmenuzar las palabras, sacándolas de contexto y acomodándolas a sus ofendidos pensamientos.

Muchos saben (porque hice uno o dos post diciendo lo feliz que estaba) que mi hermano se vendría a vivir a casa con su esposa por razones personales. Yo estaba flamante de felicidad porque ya mi hijo y yo no estaríamos más tan solos, tendríamos la compañía de personas maravillosas. Llegaron el 5 de enero pasado. Todo bien, todos estábamos contentos. Según mi hermano (y digo "según él", porque cuando yo he pasado temporadas con ellos en su casa en la isla de Margarita, donde ellos vivían, nunca la vi hacerlo) mi cuñada es maniática obsesiva con la limpieza. En los dos meses seguidos que viví con ellos hace un largo tiempo, solo la vi limpiar por donde pasa el Rey (ya sabes, las partes visibles). Mi madre y yo siempre manteníamos en orden la cocina, el baño de nosotras dos y nuestro dormitorio. A mí se me dificultaba porque mi barriga (tenía 8 1/2 meses de embarazo) me hacía sentir agotada y la respiración se me dificultaba.

Pues allá, en su casa, nosotras manteníamos en orden todo lo que ensuciábamos y el área común. Pero siempre respetando sus reglas, sus bases porque, como dice el refrán, cada quien tiene su manera de matar piojos. Cuando mamá y yo limpiábamos, era cuando ella se iba a su trabajo. Así no estorbábamos y podíamos limpiar a nuestras anchas, usando nuestros propios productos de limpieza. Aquí en mi casa, yo al igual que ella en la suya, tengo mis propias reglas. Pero yo soy muy relajada. No soy maniática de la limpieza, pero si después de cocinar, tengo la costumbre de recoger, limpiar la cocina y dejar todo en orden. Lo mismo con el baño. Lo limpio una vez a la semana porque total somos mi hijo y yo. Mi dormitorio lo mantengo igual. Tiendo mi cama todas las mañanas apenas abro los ojos. Pero más que manía, es una costumbre que tengo desde que soy una niña.

No hago alarde de cuánto limpié, de cómo lo hice, de lo agotada que esa labor me dejó y mucho menos lo hago delante de nadie porque no me interesa demostrar nada. Generalmente yo cocino después que ellos hacen su comida y posteriormente, antes de sentarme a comer, friego las ollas y todo lo que utilicé. Después de comer, lavo mi plato, el de mi hijo y limpio las hornillas y la cocina en general. Esto ha traído como consecuencia un descontento absurdo de parte de ellos. Andan con la expresión de enfado en su cara. El sábado pasado, mi hermano me pregunta que por qué yo tengo que llamar a la señora que me hace la limpieza, si _yo debo limpiar_ porque es mi casa y que no puedo "pretender" que lo haga su esposa, porque ella no es mi empleada.

Me quedé de una pieza porque eso no es lo que ha estado pasando. Me dijo que yo tenía que hacer mis cosas y le dije con mucha calma que yo limpiaba constantemente (que viene siendo cuando a mí me da la gana, pues 😠. O como te comenté, según mi horario y cuando ellos no están en casa). Su respuesta fue: ¡No te he visto! O sea... Le dije que no tenía que verme haciéndolo porque lo hacía cuando ellos no estaban. Lo cierto es que ayer que fue mi día libre en el trabajo y aprovechando que ellos no estaban, hice mi limpieza del baño, dormitorio y cocina y puse a lavar la cortina de la ducha. Muy relajada y a mi propio ritmo. El caso es que ellos se devolvieron a buscar algo y se encontraron con todo esto. En la cara se les vio reflejada la pena de estarme juzgando y de que ellos no han hecho nada pensando mal de mí.

He llegado a sentirme como una intrusa dentro de mi propia casa, al punto de llegar del trabajo y encerrarme en mi cuarto y salir solo para lo básico (hacer algo rápido de comer, tomar una ducha, etcétera). No entiendo por qué razón ellos no pueden adaptarse a mi forma de vida. Es cuestión de formar un equipo, no de andar buscando defectos o quién trabaja más o quién hace menos en la casa. A mí realmente me da igual si ellos limpian o no porque yo lo hago y no estoy tratando de mirar los defectos de nadie. Lo hago de manera automática y no tengo día u hora fija para ello, sino que lo hago cuando no hay nadie en casa, porque es más cómodo para mí. Lo que me molesta es que digan que yo estoy esperando que ellos me resuelvan y mantengan limpio el espacio y hasta se sientan ofendidos por eso 😮 y en eso se les pasa el tiempo, se envenenan, crean un ambiente desagradable con una energía de enfado y conflicto.

Hoy la cosa estuvo mejor porque después de haber visto lo que yo estaba haciendo ayer, se tuvieron que guardar la lengua allá adentro donde no les da el sol 😫 y hoy se han portado relativamente bien. El punto es que yo me pongo a pensar que en mi afán de tratar de preservar la paz en mi hogar a toda costa, acepto y tolero este tipo de actitudes y juzgamientos por parte de ellos. Quizás soy muy permisiva por la misma razón de no querer entrar en contrapunteos ni diatribas estériles. Confío en que el tiempo y los hechos me darán la razón. Por ahora necesitaba sacar de adentro esta situación que me tenía bastante incómoda. Ya lo he soltado, ya me desahogué 😊.