Hunting smiles in black and white | Week 129 [EN/ES]

Hello coffee lovers! Like someone rediscovering beauty through a window, we arrive hand in hand with @cinnccf, who invites us to describe the atmosphere, service, and our drink order at a coffee shop we recently visited.  We arrived at Comic Coffee in the pleasant company of @lizandra and her son Dylan to draw our smiles in black and white through that surprising window where young customers shared their stories while we watched.   Of course, they were hours filled with stories and commentary on a variety of topics. I ordered a Cuban espresso while Dylan and @lizandra enjoyed delicious ice cream Frappuccinos.  The look in the eyes of a dog at his window led us to create funny stories, and the hours passed...  Dylan was having fun with his glass and straw, sipping the frappuccino...   Meanwhile, I set out to *catch* @lizandra, who tried to *catch* us tasting our drinks...   You may have noticed the decor of this café, replete with subtle, well-coordinated lines designed to highlight a welcoming atmosphere in keeping with the atmosphere that embraces its customers. The coffee, with its optimal consistency, was a sublime companion for groups to laugh at, or even for those who came alone to immerse themselves in their free time.  While this place's prices don't allow us to go every day as often as we'd like, I do recommend visiting when the opportunity arises. The service, the weather, the music, and the offerings will embrace you—in black and white, yes, but it will be remarkably special to embrace them.  Until the next cup of coffee that illuminates you, a hug of light!

¡Hola amantes del café! Como quien redescubre lo hermoso a través de una ventana llegamos de la mano de @cinnccf, quien nos invita a describir el ambiente, el servicio y nuestro pedido de bebida en una cafetería que hayamos visitado recientemente.  Arribamos con la grata compañía de @lizandra y su hijo Dylan al Comic Coffee para dibujar en blanco y negro nuestras sonrisas a través de esa ventana sorprendente donde una jóvenes clientes compartían sus historias en plena contemplación nuestra.   Por supuesto, fueron horas repletas de cuentos y comentarios sobre tema disímiles. Pedí un café expreso cubano mientras Dylan y @lizandra degustaron unos exquisitos Frapuccinos de mantecado.  La mirada de un perro en su ventana nos llevó a construir historias divertidas y transcurrían las horas...  Dylan se divertía con su copa y su pitillo sorbiendo el frapuccino...   Mientras, me di a la tarea de *cazar* a @lizandra que intentó *cazarnos* a nosotros en la degustación de nuestras bebidas...   Habrán podido apreciar la decoración de esta cafetería, pletórica de líneas sutiles y bien sincronizadas en función de resaltar un ambiente acogedor en consonancia con el clima que abraza a los clientes. El café, con una calidad óptima en su consistencia, se convertía en una compañía sublime para reír en grupos o también para aquellos que acudían solos para sumergirse en sus ratos libres de ocio y disfrute.  Si bien este lugar tiene precios que no permiten podamos acudir cada día en varias ocasiones como uno quisiera, sí recomiendo sea visitado cuando las posibilidades se concreten. El servicio, el clima, la música y las ofertas, les abrazarán, en blanco y negro sí, pero será notablemente especial acogerlas.  ¡Hasta la próxima taza de café que les ilumine, un abrazo de luz!