Versión en Español
Hace un par de días examiné el cuento **Caperucita Roja** de los hermanos Grimm, una edición que adquirí en la Feria del Libro, cuya encuadernación es de tapa gruesa y las ilustraciones corresponden a dibujos animados sencillos, pero el texto estaba en caligrafía cursiva, lo que dificultaba la lectura para los pequeños. Ahora, tengo dos versiones de un mismo relato puesto que en mi libro de clásicos infantiles está una edición de letras grandes y cuyos dibujos lucen más elaborados.   La primera diferencia notable que he percibido es que la primera Caperucita luce como una niña de 7 u ocho años, mientras que la otra podría estar en los 12 años, justamente la edad cuando las jóvenes en el siglo XlX comenzaban a ser preparadas para afrontar el papel de esposa y madre.  En el primer cuento hay una advertencia latente: ¡hay muchos peligros en el bosque!, al encontrarse con el lobo, el animal humanizado le propone una carrera a la casa de la abuela. En cambio, en el segundo, el lobo la quería devorar allí mismo, pero no se atrevió porque había unos leñadores cerca. Incluso, desde su inocencia, no pensó que era peligroso hablar con el lobo.  En ambos relatos el lobo llega antes a la casa de la abuela, sin embargo, en la versión para niños grandes se presenta una advertencia, Caperucita nota que la abuela tiene una voz grave, reconoce que algo no está bien, pero se confía, descarta a su intuición, y sigue adelante. Por otra parte, en la versión para niños pequeños no se distingue esa alerta de peligro, Caperucita entra en la casa y se dirige directamente hacia la habitación de la abuela. En el momento cumbre del cuento, ambas versiones también van por caminos diferentes. En la versión para niños pequeños, el lobo se come a Caperucita, pero posteriormente un cazador le abre el estómago al animal, extrae a la niña y a la abuela, luego lo cose y procede a amarrarlo a un árbol, permaneciendo vivo, observando al resto de los personajes degustar lo que había en la cesta.  En contraste, en la otra versión, el lobo no puede comerse a Caperucita porque un leñador, atento a los gritos, lo asesina cortándole la cabeza con un hacha antes de que pueda causarle algún daño a la niña. La decapitación con hacha era la pena capital para los criminales en el siglo XIX, en este caso, el lobo ya había matado a la abuela y por lo tanto se justificaba su deceso.  Es de hacer notar que en la versión original de **Caperucita Roja**, publicada por Charles Perrault en 1697, no se advierte un final feliz porque el lobo logró sus objetivos y sus crímenes quedaron impunes, de allí que los Hermanos Grimm se atrevieran a modificarlo para originar un relato más amigable para los niños.
✓Photos from my personal gallery, edited with Fotocollage.
✓Text translated with DeepL.
✓Fotos de mi galería personal, editadas con Fotocollage.
✓Texto traducido con DeepL.