
Saludos, amigos, bendiciones. Espero que se encuentren bien. Hoy quiero contarles sobre la hermosa noche que pasó mi abuela materna. Su cumpleaños fue hace un par de días y pasamos tiempo con ella, sus hijos y nietos. Pasamos un momento sencillo e íntimo. Compartimos dulces y salados, cortamos su pastel y servimos refresco. Mi abuela estaba muy feliz, aunque no le gusta que le canten "Feliz Cumpleaños", así que solo canta una versión rápida y corta.Le dieron regalos, y su favorito es el dinero en efectivo. Le encanta que le den dinero. Dice: "Dame dinero de verdad, es mejor", jaja.
Después de servir el pastel, pensó que sería la sorpresa de la noche. Más tarde, llegó su sobrino con el mariachi que dirige. Al principio, mi abuela no se dio cuenta de quién había llegado, ya que no ve muy bien de noche. Se preguntó quiénes eran esas personas junto a la casa, y le dije que eran los vecinos que estaban descargando cosas de su maleta. En realidad, eran los mariachis sacando sus instrumentos para empezar el espectáculo. Cuando mi primo empezó, le dedicó una dedicatoria muy dulce y llena de cariño, y luego empezaron con varias canciones que conmovieron profundamente a todos los presentes. Me encantó verla tan feliz. Que Dios la cuide. Espero que les gusten las fotos.


