Para mí, la naturaleza tiene un lenguaje mediante el cual siempre nos está expresando cosas, queda de parte de cada quien descifrarlo, entenderlo y tomarlo, si así lo desea. A través de mi óptica me llama mucho la atención buscar la manera de dejar plasmado algo de eso en mis fotografías para entenderla mejor.

Creo se me pasó decirles que soy graduada en la Universidad como Bióloga, pero nunca ejercí la carrera. Desde hace un tiempo me entregué a la fotografía como medio de expresión y esto se ha convertido para mí en un estilo de vida. Y entonces en este momento se preguntarán, y a qué viene esto?

Pues, para explicarles que la vida tiene un ritmo natural, que a veces no entendemos, no vemos señales en nada, no logramos descifrar situaciones, o eventos inesperados. La vida nos lleva a transitar por senderos desconocidos, de los que luego, con el paso del tiempo entendemos el por qué y por ello les traje esta serie fotográfica hoy, donde podemos ver cuidadosamente como la naturaleza tiene su ritmo, nos lo presenta ante nuestros ojos, solo que a veces eso pasa desapercibido.

Lograr establecer estas analogías con lo que nos rodea, nos despierta, nos pone más atento, y empezamos a entender un poco en nosotros mismos las diferentes experiencias de vida, nos hacemos más perceptivos para seguir en el camino. Mi invitación es a prestar atención a los pequeños detalles de la cotidianidad, de ellos podemos aprender mucho. La clave está en observar.
Todas las fotografías son de mi autoría, tomadas con una Canon Rebel T3 Un placer compartir con ustedes nuevamente, los leo en los comentarios. @zailecita