Hello, everyone! I am very happy to greet you again from the Cinnamon Cup Coffee community. Today, I would like to invite you to a digital coffee, just like my dear @equipodelta and I did. On this occasion, we both discovered a new place, and I think we fell in love with both the coffee and the facilities. It is called Pa / Artesa, located in the Unicentro Shopping Center in the city of Maracay, Venezuela.
To accompany our pleasant conversation, Isabel and I ordered a couple of coffees. She drank a mochaccino and I ordered my usual vanilla latte. I confess that on this occasion I broke my diet and added sugar to my coffee. I felt it was necessary to accompany that sweet moment, and to top it off, we shared a delicious chocolate cake, possibly the best we have ever tasted in our lives.
The facilities are simple yet luxurious, although due to the heat in Maracay, I recommend sitting at tables away from the windows to better enjoy the air conditioning. The only downside is that, since it is a single space, all the noise from the blenders in the kitchen can be heard at the tables, which is what ultimately made us change seats, since our plan was to talk for hours. It was a special place, and I know I will return, so if you are in Maracay, I invite you to visit and try these delicious coffees...
¡Hola a todos! Estoy muy feliz de saludar nuevamente desde la comunidad Cinnamon Cup Coffee, hoy con la intención de invitarles un café digital, tal como hicimos mi querida @equipodelta y yo. En esta oportunidad ambos conocimos un nuevo lugar y creo que quedamos enamorados tanto del café como de las instalaciones del mismo. Se llama Pa / Artesa, en el Centro Comercial Unicentro en la ciudad de Maracay, Venezuela.
Para acompañar una agradable charla, Isabel y yo pedimos un par de cafés. Ella se bebió un moccachino y yo pedí mi acostumbrado latte vainilla. Confieso que en esta ocasión rompí la dieta y puse azúcar a mi café, sentía que era necesario para acompañar ese dulce momento, y por si fuera poco compartimos una deliciosa torta de chocolate, posiblemente la mejor que ambos hemos probado en nuestras vidas.
Las instalaciones son sencillas y a la vez son lujosas, aunque por el calor de Maracay recomiendo sentarse en mesas alejadas de las vitrinas para poder apreciar mejor el aire acondicionado. Lo único malo es que al ser un solo espacio todo el ruido de las licuadoras de la cocina se escuchan en las mesas, y fue lo que hizo que al final cambiáramos de lugar, ya que nuestro plan era hablar y hablar por horas. Fue un lugar especial y sé que volveré a ir, así que si estas en Maracay te invito a conocerlo y probar estos deliciosos cafés...
To accompany our pleasant conversation, Isabel and I ordered a couple of coffees. She drank a mochaccino and I ordered my usual vanilla latte. I confess that on this occasion I broke my diet and added sugar to my coffee. I felt it was necessary to accompany that sweet moment, and to top it off, we shared a delicious chocolate cake, possibly the best we have ever tasted in our lives.
The facilities are simple yet luxurious, although due to the heat in Maracay, I recommend sitting at tables away from the windows to better enjoy the air conditioning. The only downside is that, since it is a single space, all the noise from the blenders in the kitchen can be heard at the tables, which is what ultimately made us change seats, since our plan was to talk for hours. It was a special place, and I know I will return, so if you are in Maracay, I invite you to visit and try these delicious coffees...
¡Hola a todos! Estoy muy feliz de saludar nuevamente desde la comunidad Cinnamon Cup Coffee, hoy con la intención de invitarles un café digital, tal como hicimos mi querida @equipodelta y yo. En esta oportunidad ambos conocimos un nuevo lugar y creo que quedamos enamorados tanto del café como de las instalaciones del mismo. Se llama Pa / Artesa, en el Centro Comercial Unicentro en la ciudad de Maracay, Venezuela.
Para acompañar una agradable charla, Isabel y yo pedimos un par de cafés. Ella se bebió un moccachino y yo pedí mi acostumbrado latte vainilla. Confieso que en esta ocasión rompí la dieta y puse azúcar a mi café, sentía que era necesario para acompañar ese dulce momento, y por si fuera poco compartimos una deliciosa torta de chocolate, posiblemente la mejor que ambos hemos probado en nuestras vidas.
Las instalaciones son sencillas y a la vez son lujosas, aunque por el calor de Maracay recomiendo sentarse en mesas alejadas de las vitrinas para poder apreciar mejor el aire acondicionado. Lo único malo es que al ser un solo espacio todo el ruido de las licuadoras de la cocina se escuchan en las mesas, y fue lo que hizo que al final cambiáramos de lugar, ya que nuestro plan era hablar y hablar por horas. Fue un lugar especial y sé que volveré a ir, así que si estas en Maracay te invito a conocerlo y probar estos deliciosos cafés...
