A stroll through Salvador Allende Square (Eng/Esp)

On one of my usual walks through the city, I came across a square that I had not paid attention to before, perhaps because I always passed through this area very quickly and did not take the time to contemplate what was around. It is the Salvador Allende Square, located on Carúpano Avenue, in front of the popular ambulatory of the same name.  This square is named after the Chilean surgeon and politician Salvador Guillermo Allende Gossens. The place is sometimes pleasant, especially in the afternoon hours since in the morning there is a lot of vehicular traffic and, therefore, this area is congested. When everything is quiet you can hear the sea from the square, which gives a sense of peace.  This place is very busy for the inhabitants of the community, who visit it to talk for a while, rest and have a recreational moment. In front of it there is a bakery, so you can see people having breakfast, sitting on the benches under the shadows of many leafy trees. From here you can also see the imposing Cerro Pan de Azúcar.  I took advantage of this occasion to enjoy some time accompanied by a delicious cheese bread, which made this moment even more enjoyable. I saw several elderly people talking about their good times while they watched the movement of the cars, laughter and nostalgia mixed with the dynamism of the present. 

En una de mis acostumbradas caminatas por la ciudad, me topé con una plaza a la cual no le había prestado atención antes, quizás porque siempre pasaba por esta zona muy rápido y no me tomaba un tiempo para contemplar lo que se encontraba alrededor. Se trata de la Plaza Salvador Allende, ubicada en la Avenida Carúpano, frente al popular ambulatorio que lleva el mismo nombre.  Esta plaza recibe tal denominación en honor al médico cirujano y político chileno Salvador Guillermo Allende Gossens. El lugar a veces es agradable, sobre todo en horas de la tarde ya que en la mañana se presenta mucho tráfico vehicular y, por lo tanto, esta zona se congestiona. Cuando todo está en silencio se puede escuchar el mar desde la plaza, lo que concede una sensación de paz.  Este lugar es muy transitado por los habitantes de la comunidad, quienes la visitan para conversar un rato, descansar y tener un momento recreativo. Frente está una panadería, así que se pueden observar personas desayunando, sentadas en los bancos bajo las sombras de muchos árboles frondosos. Desde aquí también se puede observar el imponente Cerro Pan de Azúcar.  Aproveché esta ocasión para disfrutar un rato acompañada de un delicioso pan de queso, lo que alegró aún más este momento. Aprecié a varias personas de la tercera edad hablando de sus buenos tiempos mientras contemplaban el movimiento de los carros, risas y nostalgia se mezclaban con el dinamismo de la actualidad.