@vgalue

<div class="text-justify"> En la calle Gavilán, justo frente al almacén de Don Tito, había un árbol que parecía tocar el cielo. Nadie sabía qué especie era, pero todos lo llamaba…

<div class="text-justify"> A los 41, Martín ya no corría para alcanzar el colectivo. Lo dejaba pasar. No por pereza, sino porque había aprendido que llegar tarde no siempre era un…

<div class="text-justify"> Antes de que el mundo se nos hiciera tan grande y lejano, las navidades cabían enteritas en la casa de la abuela Carmen, allá en Maracay. Era una casa m…

<div class="text-justify"> Rafael nació en Maracaibo, tierra de sol ardiente y arepas con queso rallado. Desde chico, su papá lo llevaba al estadio a ver al Zulia FC, pero a Rafa…

<div class="text-justify"> En el edificio de la calle Yerbal, justo frente a la panadería que siempre huele a medialunas recién hechas, vivían Victoria y José, dos hermanos venez…

<div class="text-justify"> En la calle Belgrano, justo donde el sol se cuela entre los árboles y pinta de oro las veredas, vivía don Armando, un hombre de manos gastadas y mirada…

<div class="text-justify"> José tenía nueve años y una sonrisa que se le escapaba cada vez que algo lo emocionaba. Vivía en un barrio tranquilo, donde los domingos olían a pan re…

<div class="text-justify"> Williams tenía 45 años y una costumbre: cada mañana, antes de levantarse, se quedaba unos minutos mirando el techo, esperando que el dolor en las rodill…

<div class="text-justify"> Tom no era cualquier gato. Tenía el pelaje negro como la noche y los ojos medio cerrados incluso cuando estaba despierto. Vivía con Clara, una señora qu…

<div class="text-justify"> En la esquina de la calle Belgrano y Junín, justo donde el sol pega más fuerte a las tres de la tarde, está la verdulería de Alcira. No tiene cartel lu…

<div class="text-justify"> Era una mañana cualquiera, de esas en las que uno sale con la cabeza en mil cosas y los pies en automático. Hebert caminaba por la vereda de siempre, la…

<div class="text-justify"> Carlos tiene 41 años y una biblioteca que no guarda libros, sino consolas. Desde la Atari 2600 hasta la última PlayStation, cada estante de su casa cuen…

<div class="text-justify"> En un pequeño pueblo donde todos se conocían por nombre y apodo, vivía Julián, un chico de 13 años que ayudaba a su mamá en la verdulería los fines de …

<div class="text-justify"> No me gustan los post de comida, pero hoy me animé a mostrar este típico plato de la Costa Oriental del lago de Maracaibo, la ciudad de donde soy. <ce…

<div class="text-justify"> Era viernes, y como cada viernes, pasé por el kiosco de Don Tito antes de volver a casa. El sol ya se escondía detrás de los edificios, y Bigotes me esp…

<div class="text-justify"> Ángel tenía diez años y una sonrisa tímida que se escondía detrás de sus orejas. Vivía en Buenos Aires desde hacía dos años, pero todavía hablaba con es…

<div class="text-justify"> En El Tigre, un pueblo donde el calor derrite hasta los chismes, la rutina era siempre la misma: cafecito en la bodega de Toño, dominó en la plaza, y qu…

<div class="text-justify"> José tiene once años y una rutina que no fallaba: llegaba del colegio, se sacaba los zapatos en la puerta, saludaba a Bigotes y se sentaba frente a su …

<div class="text-justify"> José Luis no sabía cuándo empezó a querer tanto a los gatos. Tal vez fue aquella tarde de lluvia, hace años, cuando encontró a uno temblando bajo su au…

<div class="text-justify"> Don Eusebio tenía 78 años y una chaqueta de pana que usaba aunque hiciera sol. Vivía en el barrio La Parroquia, en Mérida, y todos lo conocían por dos …